Granada celebró la fiesta de Patrón, San Cecilio, uno de los siete Varones Apostólicos

Granada volvió a subir al cerro del Sacromonte para venerar al Patrón San Cecilio, solemnizando la celebración con la tradicional misa en su honor y recuerdo y dando a besar las cenizas del Santo Patrón. Fiesta popular y solememnidad religiosa se dieron la mano para festejer este primer domingo de febrero, fiesta además que coinicidía con la litúrgia de la festividad del Patrón. Era la fiesta en honor al Patrón de Granada. En el Ayuntamiento se disponían a organizar el traslado de los concejales y autoridades hasta la Abadía. Antes habían subido los comisarios de este año, Fernando Egea y Francisco Cuenca, para departir antes del acto con los miembros del Cabildo de la Abadía del Sacromonte. Sergio Fajardo y David Cuerva eran los comisarios sacromontanos que habían dispuesto todo lo necesario por parte de la Abadía para que la jornada fuera brillante y de fiesta.

“Nuestro cometido es procurar que todo salga bien, que los accesos a la abadía estén en condiciones y que la gente que suba disfrute la jornada”, nos comentaba el comisario Cuenca. Egea, por su parte, se congratulaba “de la belleza de este lugar tan extraordinario para Granada. No puede ser que algunos granadinos no lo conozcan y por ello nosotros debemos insistir siempre en la riqueza histórica que tiene este sitio para los creyentes y el lugar privilegiado para todos los que deben conocer la Abadía como foco de cultura y formación”.

Todo dispuesto y unos minutos antes del mediodía, la comitiva con el alcalde al frente se dirigió hasta la puerta principal del templo. Allí fueron recibidos por canónigos y comisarios, junto con la Policía Local con traje de gala, porteros y maceros del Ayuntamiento y las “grimpolas” que habían sido colocadas en el interior del templo, significando la solemnidad de la celebración. A un lado, el derecho del presbiterio, la urna con las cenizas del Patrón, San Cecilio, extraídas del horno en el que la tradición asegura que el Varón Apostólico fue martirizado y incinerado.

“Recordar que tenemos que dejar atrás muchas nostalgias y dejar caer cosas del pasado oscuro de la Iglesia para vivir la experiencia de la Gracia, para ofrecerla al mundo”, indicó el arzobispo de Granada, monseñor Martínez Fernández, en la homilía de la Eucaristía. El alcalde ocupaba un lugar próximo al altar mayor, flanqueado por los ediles-comisarios, así como por parte del equipo de gobierno municipal. También habían subido otros tres miembros del grupo municipal socialista, así como el teniente general Jefe del Madoc, Alfredo Ramírez; el coronel-jefe de la Base Aérea de Armilla, Juan Antonio Ayllón, y por la Junta de Andalucía el delegado de Salud, Higinio Almagro. El presidente de la Federación de Cofradías, Jesús Muros, y el hermano mayor de la cofradía del Cristo del Consuelo, Francisco López, habían sido invitados también a la celebración del día de San Cecilio.

Alta la participación de fieles en el interior de la abadía del Sacromonte, con un protocolo y liturgia cuidado y austero, junto a la ofrenda de estoraque y una rosa natural por parte de los comisarios, fueron algunos de los momentos vividos en el interior del templo. Luego, se dieron a besar las cenizas del Patrón granadino y se procedió a la ofrenda de flores en el lugar donde se encontraron las reliquias de San Cecilio, en las Santas Cuevas. Allí, el arzobispo y el alcalde oraron, acompañados por los invitados que conocieron parte de la historia de este lugar de martirio de cristianos.