La Sierva de Dios, Conchita Barrecheguren, será beata tras aprobarlo el Papa Francisco
En el interior del Santuario de Santa María del Perpetuo Socorro se veneran los restos de la hasta ahora Sierva de Dios, Conchita Barrecheguren, y de su padre el también Siervo de Dios, Francisco Barrecheguren. Ambas tumbas reciben a diario los rezos y oraciones de muchos devotos que recuerdan a esta niña granadina fallecida el 13 de mayo de 1927 a los veintidos años de edad, que ahora será beatificada después de muchos años de expediente abierta para la Causa de Beatificación, del que es vicepostulador Francisco Tejerizo Linares, vicario episcopal granadino, que ha dedicado todas sus fuerzas y energías a esta Causa hasta que finalmente en el día ayer, durante la audiencia concedida por el Santo Padre Francisco al cardenal Marcello Semeraro, Prefecto para la Congregación de las Causas de los Santos, concedió y reconoció el milagro atribuido a la intercesión de Conchita Barrecheguren.
Reconocido este milagro del que aún no se saben ni conocen más detalles la Congregación del Santísimo Redentor, Redentoristas, dispondrá de acuerdo con el Arzobispado de Granada la forma y manera en la que se realizará la beatificación de Conchita Barrecheguren, cuyo Carmen en la Antequeruela es también lugar de peregrinación y oración cada trece de cada mes.