Exaltación y hermanamiento en la cofradía de Santa María de la Alhambra
La cofradía de Santa María de la Alhambra vivió el pasado domingo la trigésimo octava edición de su Exaltación a la Virgen. Se desarrolló en su sede canónica y corrió a cargo del cofrade Manuel Amador Moya, en la que alabó la imagen y la belleza de la Virgen y, por supuesto, la advocación de Nuestra Señora de las Angustias con la que el exaltador está muy vinculado personalmente.
También este mismo fin de semana la cofradía alhambreña vivió el hermanamiento en la vecina capital jiennense con la cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno «El Abuelo». En el acto, celebrado en su templo y ante el altar de cultos que preside esta devoción jiennense tan importante, pues en estas jornadas se celebra la tradicional novena. Tras el acto en el que se intercambiaron recuerdos, la cofradía de Santa María de la Alhambra recibió un cuadro con el Titular de la cofradía y la hermandad granadina obsequió con un libro que recoge la historia de la hermandad. El hermano mayor, Rafael Ruiz, fue acompañador por otros miembros de la junta de gobierno de la corporación nazarena del Sábado Santo granadino.
Tras este acto protocolario se giró visita a dos de las casas de hermandad que posee la cofradía del «Abuelo», con exposión de enseres una y la otra con los despachos y dependencias administrativas de la cofradía, así como sala de juntas. Una representación de la Junta de Gobierno alhambreña acompañará en la Estación de Penitencia la madrugada del Jueves Santo y probablemente una representación del Abuelo estará el Sábado Santo en la estación penitencial de la hermandad granadina.