Álvaro Barea exaltó a la Virgen del Dulce Nombre en su XXV aniversario
Con motivo del XXV aniversario de la bendición de María Santísima del Dulce Nombre y de San Juan Evangelista, Titulares de la cofradía de Jesús Despojado, la cofradía de Fígares se trasladó al templo de los Santos Mártires Justo y Pastor para celebrar su exaltación mariana y concierto extraordinario. El acto de oratoria cofrade fue encargado a Álvaro Barea Piñar, pregonero de la Semana Santa de 2019, quien ofreció un texto llego de veneración a la Virgen del Dulce Nombre, poniendo en las manos del Discípulo amado la custodia de todos los cristianos.
«Los pregoneros no somos profesionales de esto ni cobramos por esto, simplemente tenemos cierta facilidad y empatía para poder expresar lo que todos los aquí presentes sentimos», señaló Alvaro Barea, recordando que «cuando escribo lo hago son sinceridad» para referirse a la satisfacción por acercarse a los hermanos de Jesús Despojado afirmando que «soy un cofrade que intenta devolver el cariño que recibe con el cariño que da y para poder escribir necesito tener vivencias». «Nuestra devocion a la Virgen es universal aunque nuestras advocaciones sean distintas».
La exaltación «escrita desde este otoño» recordó vivencias del Domingo de Ramos, de barrios de Granada y de recuerdos, «sollozos de un niño» y de «hermana a hermana» para referirse a la devoción a la Virgen de la Victoria y a la del Dulce Nombre en la misma noche del Domingo con el que se inicia la Semana Santa. Álvaro Barea recordó la procedencia cordobesa de la Virgen del Dulce Nombre y de Jesús Despojado, imágenes salidas del taller de González Jurado de la ciudad de la Mezquita. La Virgen de la Esperanza o la Piedad de Miguel Ángel unieron sus recuerdos al nombre de su madre y sus recuerdos junto a ella. Habló de las manos de la Virgen del Dulce Nombre y de San Juan Evangelista «que se buscan y se encuentran». Poesías y prosa dedicadas a esta advocación «que con san Juan vas confortada» en la exaltación que fue muy aplaudida por el público que llenó el templo de la plaza de la Universidad.
Finalizó el acto con la intervención de la banda de Jesús Despojado y lo había iniciado la Banda y Unidad de Música de los Ángeles. Los directores de ambas formaciones recibieron, junto al exaltador, un recuerdo de esta celebración de aniversario.