Besamanos a Nuestra Señora y Madre de la Consolación, en el monasterio de clarisas
La imagen de Nuestra Madre y Señora de la Consolación estuvo ayer expuesta a la veneración de los fieles y besamanos en su capilla del Santo Cristo de San Agustín, del monasterio contemplativo del Santo Ángel Custodio. Una celebración que tan sólo fue interrumpida durante la celebración de la Eucaristía de la comunidad de religiosas franciscanas clarisas que regentan el convento. La imagen de la Virgen de la Consolación se encontraba en el presbiterio de la capilla, a los pies del Santo Crucifijo de San Agustín, primorosamente vestida por Francisco Garví.
Durante toda la jornada fueron numerosas las visitas de veneración y oración que recibió la Dolorosa de la calle San Antón como final de la celebración del triduo de Reglas celebrado y que culmina hoy domingo con la Función Solemne en su honor, presidida por el consiliario Director Espiritual, Francisco J. Tejerizo Linares.
También durante estos días han sido muy numerosas las visitas a la Casa de Hermandad donde se encontraba expuesta una pequeña exposición con el patrimonio de la hermandad agustina, principalmente de su paso de palio, que aún hoy puede ser visitada.