Aunque Martínez Montañés reconoció ser discípulo de Pablo de Rojas, esta afirmación pudo ser errónea e intencionada
El catedrático sevillano Andrés Luque Teruel desarrollo una ponencia en el centenario de la cofradía del Cristo de la Misericordia (Silencio)
«Granada conquistada en 1492 y hasta entonces ni Sevilla ni Granada tienen escuela de escultores figurativos ninguna de las dos, aunque Sevilla fuese reconquistada dos siglo antes. Lo primeros escultores en Sevilla, identificados, van a ser a principios del XVI, van a ser Domenico Fancelli, Pace Gaggini y Antón María Maragliano, entre otros», señaló el catedrático de Historia del Arte, Andrés Luque Teruel, en el transcurso de una interesante conferencia que llenó el templo conventual del Carmen, de la comunidad de Monjas del Carmen de nuestra ciudad.
La convocatoria fue una cita de la hermandad del Santísimo Cristo de la Misericordia, del Silencio, con motivo del centenario de la fundación de su hermandad y que, paralelamente viene mostrando parte de su historia en los claustros del monasterio contemplativo.
El ponente versó sobre «La escuela granadina y su influencia en el barroco sevillano» y en la misma realizó un repaso de la historia escultórica desde los siglos XVI al XVIII, centrándose en la procedencia de Juan Martínez Montañés, alcalaíno, y su maestro Pablo de Rojas señalando que «hay conexiones directas entre ambos artistas y cómo uno de ellos Melchor de Turín viene aquí y, a través de Vázquez el Viejo van a Sevilla mucho antes de Pablo de Rojas y mucho antes que Juan Martínez Montañés», indicó en su conferencia. Los brazos de ambas escuelas son indisolubles y así lo manifestó Luque Teruel, en una sesión muy académica y proyectando explícitamente la biografía de los maestros y desmoronando en momentos la vinculación directa entre Martínez Montañes y Rojas, aunque sí entroncados a través de las distintas ramas familiares «porque su vinculación es de origen, es de nacimiento de ambas, es de un tronco italiano común con dos grandes figuras Pedro Raxis «El Viejo» y Juan Bautista Vázquez «El Viejo». En la conferencia el catedrático hispalense realizó un recorrido por la historia de ambas escuelas desde sus orígenes hasta llegar a Mora, desde el Renacimiento, primer Barroco y segundo Barroco escenográfico.
El árbol genealógico «tiene una gran cantidad de artistas, escultores o pintores y todos ellos trabajaron aquí, en Granada o en Italia pero siempre en contacto en Granada, en el siglo XVI, mucho antes que Pablo de Rojas». Luque Teruel defendió la vinculación de Martínez «El Montañés», que aunque nacido en Alcalá la Real tenía procedencia de Cantabria, con Pedro Raxis «El Viejo» «y no con Pablo de Rojas aunque las influencias no tienen por qué ser directas sino a través de la obra» y para ello mostró ejemplos de retablos que unen a ambos. El catedrático estableció paralelismos entre retablos de Carmona, Lebrija o el de San Jerónimo, de Granada, uniendo nombres como los de Pablo de Rojas a través de Pedro de Raxis, «El Viejo» y Juan Bautista Vázquez «El Viejo» como «eslabones más en una cadena, pero nunca el origen entre esas relaciones». «Jamás» señaló rotundo el catedrático hispalense para mostrar «la negación de la ascendencia italiana en Juan Martínez Montañés».
Andrés Luque afirmó que «De Juan Martínez Montañés se habló que es discípulo de Pablo de Rojas porque aquel quien lo reconoció en un testamento. Yo fue discípulo de Pablo de Rojas. lo dice él mismo. A lo que diga uno mismo no se le pueden poner objeciones pero la verdad es que hay muchas objeciones. No al contacto sino a cuando se produce el contacto. Hay muchas objeciones. Una de ellas es que cuando nace Martínez Montañés Pablo de Rojas tiene diecinueve años» y por entonces el maestro que acogía a un aprendiz debía mantenerlo en el taller con alojamiento, comida, ropa y formación y el aprendíz tenia la obligación de servirlo hasta el final de su aprendizaje y «no hay ningún maestro del Siglo de Oro que tuviera aprendices con esa edad, porque no tiene aún mercado para tenerlos». Siguiendo con esas motivaciones aseguró que Martínez Montañés «pasa el examen del gremio en Sevilla y si pasa allí el examen, no pudo formarse en Granada porque no es legal. Si se forma en Granada, tiene que examinarse en Granada» poniendo el ejemplo de Pedro Roldán cuando llegó a Sevilla, «que formado aquí no podía trabajar en Sevilla porque no había pasado el examen allí».
Una interesante conferencia con conclusiones de unión entre Pablo de Rojas y Juan Martínez Montañés, pero no de manera directa sino a través de las conexiones entre ambas escuelas que si dejaron influencias en líneas de Pedro de Raxis con el maestro alcalaíno pero «de manera directa con Gaspar de Raxis que fue su policromador».