La hermandad de la Virgen de las Angustias recupera las primitivas andas de la Patrona para el vía crucis con el Crucificado de la Fe.
Diez minutos antes de las seis y media de la tarde, la imagen del Santísimo Cristo de la Fe, de la Sacristía de la basílica de Nuestra Señora de las Angustias, se ponía en la calle con el adorno de un pie de rosas a los pies de la cruz y sobre las primitivas andas de Nuestra Señora de las Angustias. Se han recuperado aquellos, hasta hace unos años, varales de las andas procesionales tapizadas en rojo que tanto sabor tenían y que hace unos años se cambiaron por los actuales para dar mayor consistencia y seguridad al paso procesional de la Patrona. Era el Vía Crucis organizado por la hermandad patronal que, dirigido por el párroco Blas Gordo, realizó su camino por el Embovedado, Puente Romano, Paseo de los Basilios y llegada al templo parroquial de San José de Calasanz, para regresar posteriormente a la basílica. Acompañaba la capilla de música «Santo Ángel Custodio» de la hermandad del Cristo de San Agustín.
Cruz parroquial con ciriales, abriendo cortejo, diecisiete parejas de hermanos y hermanas en el mismo, el estandarte de hermandad y las andas procesionales recorrieron el itinerario previsto para el rezo de las catorce estaciones, iniciándose la primera de ellas en el interior del templo.
Conforme iba avanzando la comitiva más fieles y granadinos acompañaron al Crucificado de Pablo de Rojas uniéndose al rezo de las estaciones de esta acto penitencial.