Luz del Zaidín en su XXV aniversario
La Virgen de la Luz se recogió por una calle Polinario abarrotada de cofrades y zaidineros a las dos de la madrugada. Fueron ocho horas de estación conmemorativa de su XXV aniversario de la incorporación de la imagen y bendición, que se vio rodeada de muchos granadinos. El cortejo lo abría la agrupación musical de Jesús Cautivo y en el mismo se integraban sesenta y cinco parejas de hermanos. Además, estuvieron presentes las cofradías de la Lanzada y Redención, junto a las del Nazareno, Cautivo, Estrella, Borriquilla, Consuelo, Escolapios, Esperanza, Rescate, Descendimiento, Santo Sepulcro y Archicofradía del Rosario. En la presidencia formó también la edil municipal Lorena Rodríguez, de Ciudadanos, junto con hermanos mayores anteriores de la cofradía, Miguel Mesa y Rafael Marti, así como el presidente de la Federación de Cofradías, Jesús Muros. Tras el palio, la banda «La Victoria», de Fuentevaqueros que realizó una interpretación magistral de su repertorio, especialmente escogido en el regreso por Avenida de Dilar y Polinario.
Calor y más calor a las seis de la tarde cuando se abrieron las puertas del templo del Corpus Christi. Emitiva la salida con la marcha «Luz del mundo, reina del Cielo» cantada por hermanos de la corporación, mientras una «petalá» se arrojaba al paso de la Virgen. No hubo cera encendida, tan sólo los seis ciriales del paso que se iluminaron a partir de Avenida de Dílar.
El paso de la Virgen de la Luz, estrenando cinco luceros en el pecho y una rosa en su mano, en orfebrería de Alberto Quirós, marchaba adornado con rosas naranja, mini rosas, lisiantum blanco, estátice amarillo, hiedra, dendrobium y bouvardia, a las órdenes de Christian Coucholas.
La Virgen llegó hacia las nueve de la noche a la basílica de la Virgen de las Angustias adentrándose en su interior hasta los brazos de cola, y presidiendo el rezo de una estación, junto a la Patrona de Granada.