El premio «Sánchez Osuna», en manos de las costaleras de la Virgen de la Caridad

«En la genética de nuestra hermandad está la figura de la mujer costalera y no sólo una hermana al uso sino muy comprometida con la hermnadad desde hace treinta años», señaló Javier Sierra, hermano mayor de la cofradía del Santísimo Cristo de la Lanzada,  tras recibir la cuadrilla de costaleras el VIII premio «Antonio Sánchez Osuna» que recuerda al Maestro de Capataces de Granada.

Fue una cita sencilla pero muy emotiva, de reconocimiento «al trabajo realizado durante treinta años, de los que Francisco Carrasco lleva al frente de la misma más de quince años», indicó el hermano mayor de la cofradía zaidinera. Le hizo entrega del prestigioso galardón el hermano mayor de la cofradía de la Santa Cena Sacramental, Francisco Barroso, quien en sus palabras iniciales destacó «el esfuerzo y la evolución de la cuadrilla en todos estos años, así como su compromiso con la cofradía». Dio lectura al acta del jurado, el secretario y veterano costalero Heriberto Eslava, ante una sala Capitular de la Archicofradía del Rosario totalmente llena de hermanas costaleras y cofrades de la ciudad. Recogió el premio la vocal de costaleras, Desiree Nogueras Almendros, acompañada por el capataz, Francisco Carrasco Aguilera y el hermano mayor de la cofradía de la Lanzada, Javier Sierra Antequera.

En la presidencia del acto acompañó a Francisco Barroso los hermanos mayores de las cofradías de los Favores, José Moreno, y de la Humildad, Germán Bolivar, ambas hermandades muy ligadas a la vida cofrade de Sánchez Osuna. En representación de la familia del recordado capataz granadino, su nieto Curro Toro Sánchez; el pregonero de los Costaleros de Granada, Antonio Cambil y el costalero de la Santa Cena, Servando García. Todos ellos son componentes del jurado que concedió el premio, junto a José Carlos Torres Milena, capataz granadino que se encontraba ausente.