Admitida por Cultura de la Junta de Andalucía la restauración del Cristo de la Salud, de la parroquia de San Andrés.
La imagen del Santísimo Cristo de la Salud, de la parroquia del Apóstol San Andrés, será intervenida para su conservación en los próximos meses, una vez se cumplan todos los requisitos solicitados por la Delegación de Cultura de la Junta de Andalucía dentro de su programa de restauración y conservación de bienes de parroquias o hermandades. En esta ocasión la solicitud la formula la propia parroquia de San Andrés, con el respaldo de la cofradía de la Entrada de Jesús en Jerusalén y la intervención será costeada al 80 % por la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía y el restante 20 % por la propia parroquia. En esta ocasión la aportación de la institución andaluza es de 12.000 euros.
El próximo viernes expira el plazo para que las solicitudes aprobada en una primera fase aporten la documentación solicitada por la Administración andaluza. El pasado viernes se pudo conocer esta resolución inicial por el que se aprobaba las restauraciones de las que ya les hemos dado información en estos días anteriores de la Virgen de la Paz, de la parroquia de San Cecilio; la capilla de San Miguel Arcángel de la iglesia albaicinera de su nombre y esta imagen del Cristo de la Salud.
La imagen del Santo Cristo de la Salud es una obra atribuida a Diego de Siloé, del siglo XVI. La advocación de la Salud la adquiere el Crucificado por su intercesión en la epidemia de peste bubónica de 1679 que asoló nuestra ciudad. Durante esta epidemia, los enfermos afectados por la peste fueron instalados por las autoridades sanitarias fuera de la ciudad, delimitada por la Puerta de Elvira, como medida de cuarentena para evitar el contagio. Los enfermos se congregaban en una gran explanada delante del Convento de la Merced y de la Iglesia de San Idelfonso, llamada del Triunfo de la Inmaculada. Desde la iglesia de San Andrés, el Cristo era portado en andas hasta esa zona, para servir de consuelo a los enfermos y para que le rogaran su curación. Cuenta la leyenda, que en una de esas salidas una paloma, que los enfermos atribuyeron al Espíritu Santo, sobrevoló la imagen del Cristo en todo su recorrido y, finalmente, se posó en su brazo derecho. En ese día se experimentaron curaciones de los enfermos allí presentes y el suceso se atribuyó a un milagro. Es por ello que el Cristo de la Salud luce sobre su brazo derecho una paloma de plata, como símbolo que recuerde aquel milagro.
En el siglo XX se siguieron celebrando cultos en su honor, quedando constancia de los mismos hasta 1961. Pasaron los años hasta que, a mediados de marzo de 1997, Granada volvió a contemplar al Cristo de la Salud en las calles, en un Vía Crucis cuaresmal. Desde entonces, y tras el cierre en 1999 de la iglesia parroquial de San Andrés Apóstol debido a su deterioro y necesaria restauración, el Cristo de la Salud permaneció en dependencias parroquiales. Casi dos décadas después, el 28 de mayo de 2017, volvió a presidir el Altar Mayor de la iglesia de San Andrés, tras su reapertura y en la cuaresma de 2019 quedó expuesta a la veneración de los fieles en el interior del templo de la calle Elvira.