¡¡ Adiós 2020, bienvenido 2021 ¡¡

Hemos alcanzado el final del año. Estos 366 días que se nos van llenos de buenos momentos, recuerdos, pasiones, sufrimiento, caricias y malos instantes, muchos, más de los deseados, más de los esperados. Se nos va caminando por vereda del olvido para tantos y tantos hermanos nuestros que han llenado el año de la enfermedad pandémica que se invitó sola a nuestras vidas cuando alcanzábamos el ecuador del mes de marzo. Se nos escaparon los sonidos de nuestras bandas representadas todas ellas en la corneta que Felipe Cañizares hizo temblar a los pies del Señor de los Favores. Se nos escapó el día de la Cruz en el que los cofrades nos miramos y abrazamos cada año ya en el Tiempo de Pascua. Se quedó reducido nuestro Corpus a una procesión por la nave principal del templo Catedral y nos aguardaron en sus capillas nuestro Patronos y Titulares de Gloria en un verano con distancias y con vistas al mar ocultas bajo una mascarilla.

Se nos fue septiembre y este año llenamos de nardos nuestros hogares para seguir acordándonos de Nuestra Madre de las Angustias en el mes de las flores y la oración cuando la Patrona bendice a Granada cada último domingo del mes noveno del año. Un mes que nos privó de Ella pero que siguió llenándonos de Ella. Y el Rosario esfumó sus cuentas de manera callada ante un altar de veneración que nos mitigó la espera de un año más. Nos quedamos sin corona para la Madre de Dios de la Soledad, de San Jerónimo; pero donde hemos esperado 135 años para convertir aquella coronación litúrgica en canónica, aún nos queda paciencia para aguardar uno mas.

Doce meses que se nos van y cuyo balance es personal e intransferible. Cada uno lo valora según sus personales circunstancias, pero lo que es seguro es que ha venido marcado por las cinco letras de la palabra Covid y eso es sinónimo de ausencias, días de hospital, soledad, angustia, espera, recuperación, pérdidas y tantos otros sustantivos, calificativos y verbos que podríamos conjugar cuando se nos escapa un año más.

A estas horas del final del año no queremos mirarlo de manera desafiada. Le decimos simplemente adiós, vete y déjanos en paz. Por delante, doce meses, 365 días esperanzadores y, seguro, llenos de buenas noticias y de la presencia de nuestros Titulares que nunca se marchan, que siempre andan a la espera de nuestra visita y participación en nuestra hermandad. En sus manos hemos puesto los nombres con apellidos de los que nos faltan, por la enfermedad del coronavirus o cualquier otra que les haya permitido mirar hoy de cara a Dios Padre y a su Bendita Madre.

En GRANADA COFRADE queremos mirar a 2021 con la ilusión de un niño que comienza su nueva andadura, siempre de la mano de nuestra hermandad, de nuestros hermanos, de las advocaciones que nos unen… Feliz Año Nuevo a todos nuestros telespectadores, lectores, amigos y a quienes no se identifican con nuestro trabajo, porque ellos hacen que procuremos  superar las dificultades y afrontar cada día, con la esperanza de encontrarlos a nuestro lado.

¡¡ Adiós, 2020. Bienvenido, 2121 ¡¡