Santa Teresa de Jesús regresó a su convento carmelita
Después de la misa de apertura del Año Jubilar de Santa Teresa, en el V Centenario de su nacimiento, se procedió al traslado de la imagen de Santa Teresa hasta el monasterio contemplativo de San José, de Carmelitas Descalzas. El arzobispo había presidido la Eucaristía y, por la puerta principal, salió la imagen. Se vivieron algunos momentos de intensidad emocional, sobre todo al pasar la imagen de Santa Teresa frente a los Hospitalicos, lugar donde primero se erigió la fundación de Carmelitas Descalzas hasta la construcción del convento actual. Allí fue recibida por el superior de los Agustinos Recoletos y por la hermandad de Santa Rita. También, al paso de la Santa de Ávila frente al convento de las Monjas del Carmen, Carmelitas Calzadas, de las que Santa Teresa hizo la reforma del Carmelo. En la escalinata de la calle Monjas del Carmen, la comunidad y sus colaboradores habían levantado un altar con la Virgen del Carmen y a sus plantas se situaron un buen número de religiosas. Recibieron un recuerdo de manos del prior de los Carmelitas, fray José Fernández Marín, y se entonó la Salve ubicándose la Santa frente a la Virgen. Un ramo de flores de las Carmelitas Descalzas quedó a las plantas de la imagen de Santa Teresa.
Poco después de las tres de la tarde se daba por concluida esta apertura del Año Jubilar con la entrada de la imagen de Santa Teresa de Jesús en el interior de su clausura. Una voz espontánea alcanzó a cantar los versos de “La eficacia de la paciencia”, aquellos que rezaban “Nada te turbe, nada te espante,, quien a Dios tiene nada le falta…”