VÍZNAR: El Arzobispo de Granada, monseñor Gil Tamayo estuvo en Viznar para celebrar junto a San Blas
La Eucaristía de ayer en la parroquia de Víznar revistió un cariz muy singular. Se trataba de la fiesta grande del Patrón San Blas y el encargado de «vestir» al Santo fue el Arzobispo de Granada, monseñor José María Gil Tamayo. El templo se abarrotó de fieles para la misa previa a la salida procesional de San Blas y fue el prelado granadino que la presidió y bendijo las rosquillas de San Blas. Una tradición ancestral que el pueblo cuida con mimo todo lo que rodea a su Patrón y, como es tradición, la imagen se baja del retablo lateral que lo alberga y se sube al paso donde ante la presencia de los vecinos se procede a su vestimenta de fiesta.
En esta ocasión fue el prelado quien lo «vistió» con textiles por encima de la talla que ya representa al patrón con mitra y capa pluvial. El Arzobispo estuvo presente durante toda la ceremonia y en el momento de subir al paso para vestir al Patrón delegó en Sergio Villalba, canónigo de la Catedral de Guadix, párroco de Santiago, de Baza y director de la Escolanía de la Catedral de Guadix que había cantado la misa previa a la bajada de San Blas. Monseñor Gil Tamayo volvió a dar muestras de su vinculación y proximidad con la religiosidad popular, valorando este mundo cercano a las hermandades y cofradías.
Al término de la celebración se procedió, por la tarde, a la salida procesional de San Blas, junto con la imagen de San José y la Candelaria, con el Niño Jesús vestido para bautizar y San José con la ofrenda de los dos pichones. Y como es costumbre, la «tarta de gloria» que después se reparte en el almuerzo de confraternidad.
