El Simpecado del Rocío ya está en su parroquia de San Pedro y San Pablo

La Hermandad del Rocío de Granada realizó anoche su regreso a su sede canónica, la Iglesia Parroquial de San Pedro y San Pablo. A las 20:00 horas se celebraba la Santa Misa de acción de Gracias en la Basílica de Nuestra Señora de las Angustias, por el Camino 2023, y presidida por el consiliario Manuel García Gálvez. Posteriormente, a las 20:30 horas, se disponía el cortejo encabezado por la cruz de guía, la procesión de regreso con el Simpecado hacia la sede de la Hermandad, San Pedro y San Pablo.  La procesión discurría por el centro de Granada, pasando por la Plaza de Mariana Pineda, San Matías, para llegar a Reyes Católicos, Plaza Nueva y encarar la Carrera del Darro hasta la Sede Canónica. El Simpecado era arropado por numerosos hermanos de la hermandad, así como por cofrades y devotos de la Virgen del Rocío, a los sones del tamboril y del propio coro rociero de la Hermandad.

El cortejo lo presidía su Hermano Mayor-Presidente, Alfredo Alcalde, junto con el Párroco de San Pedro y San Pablo, Manuel García y  portaba el Simpecado, el Mayordomo de la Hermandad, Javier García Marina, siendo despedida de la basílica por la hermandad de la Virgen de las Angustias y también recibida por la cofradía de Jesús de la Paciencia al pasar por la parroquial de San Matías. En el camino de regreso otros varios hermanos se turnaron para llevar el Simpecado por las calles de Granada.

A las 21:53 horas hacía su entrada el Simpecado en el interior del templo de San Pedro y San Pablo, acompañado del tamboril, Ismael Garrido, que interpretaba el Himno  Nacional de España. Ya en el interior, el Hermano Mayor felicitaba y daba la enhorabuena a todos los hermanos por el Camino y la Romería 2023. Por su parte, el Párroco de San Pedro y San Pablo, felicitaba también a los hermanos de la Hermandad y finalizaban la jornada con una oración dedicada a la Virgen del Rocío. El Simpecado quedó situado junto al altar mayor y ya en la intimidad la priostía de la hermandad lo ubicaba en su hornacina del crucero del templo.