Un quinto centenario con procesión extraordinaria presidida por el Dulcísimo Nombre de Jesús
La imagen del Dulcísimo Nombre de Jesús recorrió ayer las calles del centro de la ciudad acompañado por la banda de música de Atarfe. Una cita que se vio muy arropada por los granadinos y visitantes que llenaron el itinerario desde la iglesia parroquial del Sagrario-Catedral hasta la parroquial de Santa María Magdalena y que contó también con Coros y Danzas de Granada que interpretaron varios villancicos al paso del Niño Dios en lugares tan significativos como la plaza de Alonso Cano, la plaza de la Trinidad y la plaza de Jesús del Rescate y en el regreso a su sede. Se celebraba, como se hará aún hasta finales de junio, el V Centenario de la fundación de la hermandad.
La talla del Niño Jesús esta atribuida a Diego de Mora o a José de Risueño y se presentaba vestida con una de las doce túnicas que posee, bordada en oro y plata sobre tisú de oro y cobijado bajo templete de orfebrería cedido por la parroquia del Santo Ángel Custodio. Se había usado el paso procesional de María Auxiliadora de la Alhambra, con faroles en las esquinas de la hermandad del Señor de la Humildad, correspondientes al paso de la Soledad de Nuestra Señora y pequeños ángeles en los costeros, de la hermandad de Jesús del Rescate. Ricardo Mora era el capataz de las dos cuadrillas que igualaron bajo las trabajaderas del Niño Jesús del Sagrario.
En el cortejo formaron parte varias hermandades de penitencia y gloria de Granada, como la de la Santa Cena Sacramental, la cofradía del Cristo de la Sagrada Lanzada, María Santísima de las Penas, Santo Cristo de San Agustín y Santa María de la Alhambra, además de la Sacramental de la Virgen de las Angustias y la hermandad de las Angustias y San Pascual Bailón, de Pinos Puente. De gloria estaba la cofradía de la Virgen de la Cabeza, con sede en la parroquia de la Magdalena. Al frente del paso estaba el capataz Ricardo Mora y su equipo de capataces y en la presidencia formaba el hermano mayor, Emilio Martos; el hermano mayor de la hermandad de las Angustias, Antonio González, junto con el canónigo de la Catedral, Moisés Fernández y el concejal Francis Almohalla, en representación municipal.