1 de julio de 2025
Actualidad

Jesús Sacramentado en el Zaidín, en una nueva Custodia.

Los hermanos de la cofradía de la Sagrada Lanzada acompañaron en número de unos cuarenta en las filas a la Custodia del Corpus Chico siete días después de la celebración litúrgica del Corpus. Acompañó el cortejo la banda de tambores y cornetas de la hermandad de Jesús Despojado de sus Vestidura y en el recorrido procesional se estrenó una nueva Custodia, obra del orfebre José Ismael Moya, de La Línea de la Concepción.
La Custodia sigue un estilo barroco, caracterizado por su profusa decoración, dinamismo visual y riqueza ornamental. Se compone del viril y resplandor, circular en el centro, enmarcado por una decoración detallada con motivos vegetales en relieve. Alrededor del viril se proyectan rayos de luz en múltiples direcciones, alternando rayos rectos y flamígeros (ondulados), lo que simboliza la irradiación de la presencia de Cristo en la Eucaristía. Sobre el viril hay una cruz ornamental, también dorada y ricamente decorada, que corona la pieza. Justo debajo de la cruz se representa una figura de Dios Padre, rodeado de nubes, debajo del viril una paloma símbolo del Espiritu Santo, lo que refuerza la teología trinitaria presente en la iconografía eucarística.
El astil, tallo o soporte central está muy elaborado, con nudos decorativos que sirven de transición entre las partes y como puntos de agarre.A mitad del astil hay una figura del cordero Pascual símbolo del sacrificio de Cristo por la redención de los pecados. El resto del astil está ricamente labrado con motivos vegetales, volutas y elementos escultóricos que aportan riqueza visual y profundidad.
Finalmente la base es de forma circular ricamente decorada con relieves simétricos, cuatro rosetones uno con la heráldica de la Hermandad, otro con un corazón traspasado por siete dagas motivo que representa a la Parroquia donde esta erigida canónicamente la Hermandad, un tercer rosetón con una imagen en relieve de un pelicano iconografía del amor y de la Caridad y un ultimo rosetón con un brazo empuñando una espada detalle de la defensa de la Divina Majestad del Santísimo Sacramento. Racimos de uvas, espigas de trigo u otros símbolos eucarísticos, todos típicos del arte litúrgico barroco completan la obra. La Custodia es una obra donada por un hermano de la cofradía y se situaba bajo un tabernáculo cedido por la parroquia de La Zubia.
El cortejo iba presidido por la Custodia con el Santísimo Sacramento sobre las andas del Cristo de la Lanzada en su Vía Crucis, mandadas por Curro Carrasco, Francisco Carrasco y Luis Gallegos. Tras las mismas, el párroco Cristóbal Sánchez y el palio de respeto del Santísimo Sacramento.