La Virgen de los Dolores presidió los actos de clausura del LXXV aniversario fundacional de su cofradía de penitencia
Un año después del solemne comienzo de los actos del LXXV aniversario fundacional de la cofradía de Nuestra Señora de los Dolores quedó clausurado por el vicario parroquial Antonio Castillo. Fue una celebración Eucarística muy participativa con la presencia de numerosas representaciones de hermandades de la ciudad. Previamente durante todo el día fue muy alta la participación de cofrades y devotos de la imagen que asistieron al besamanos extrraordinario a la Dolorosa de López Azaústre, situada en el altar mayor del templo de San Pedro y San Pablo.
Bajo el tabernáculo del templo se había colocado el techo de palio de la Virgen y a ambos lados sendos paños de cera centrando la imagen de la Virgen, a los pies del tabernáculo, para la veneración de los fieles.