La Medalla de Oro de Granada, en el pecho de la Virgen de la Amargura
Anoche vivimos unos momentos brillantes con el traslado e imposición de la Medalla de Oro a la Virgen de la Amargura. Instantes de emoción e incetidumbre con la aparicion de la lluvia poco antes del comienzo previsto para el traslado desde las Comendadoras de Santiago. Una fuerte trombra de agua obligó a retrasar por dos veces la salida hasta que, definitivamente, a las 19.25 comenzaba a caminar el cortejo hacia la plaza del Carmen. Grupos jóvenes de las cofradías del Nazareno de Caniles, Despojado, San Agustín, Resucitado, Trabajo y Luz, Resurrección, Lanzada, Redención, Nazareno, Estudiantes, Estrella, Concepción, Penas, Ferroviarios, Aurora, «Borriquilla», Sentencia, Dolores, Esperanza, Favores, Rosario, Humildad, Rescate y Alhambra, estaban presentes en el cortejo. Cincuenta y cinco parejas de hermanos en filas y la representación de la cofradía de la Santa Cena, precedían al guión corporativo de la cofradía de la Oración en el Huerto de los Olivos. Antes del comienzo de la salida el concejal electo Manuel Olivares se personó en el monasterio para ofrecer un ramo de flores a la Virgen de la Amargura.
A las nueve y treinta y dos minutos de la noche el alcalde en funciones de Granada, José Torres Hurtado, impuso la Medalla de Oro de Granada a la Santísima Virgen, mientras la banda del Carmen, de Salteras, interpretaba el himno de la coronacion, compuesto por Victor M. Ferrer, y cantado por los coros de María Auxiliadora, Aires de Fígares, y el propio de la hermandad.
