17 de mayo de 2024
Actualidad

Francisco López Cánovas, comisario para la cofradía del Cristo del Consuelo (Gitanos)

Francisco López Cánovas
Francisco López Cánovas

El mes de enero lo comenzó la cofradía del Santísimo Cristo del Consuelo con un hermano mayor, José Enrique Molina. Lo finalizó con otro distinto Javier Parra y comienza febrero con un comisario que anoche fue designado por el Arzobispado de Granada: Francisco López Cánovas. «No hay más que empeñarnos en trabajar, tener ilusión y buscar la unidad de todos los hermanos», indicó anoche a nuestra redacción el recién nombrado comisario de esta corporación del Miércoles Santo. López Cánovas fue hermano mayor durante diez años hasta el mes de junio pasado, estando retirado en la actualidad de responsabilidad alguna de gobierno en la hermandad. Recibió el cargo de otro comisario, Federico Rodríguez, canónigo de la Abadía del Sacromonte y con anterioridad también otro presidente de comisión gestora, Baldomero López, había gobernado la cofradía. Desde 1998 y hasta 2004, la cofradía se mantuvo en período de intervención arzobispal que vuelve a reinar en el seno de la cofradía. Tan sólo estos últimos diez años han sido de tranquilidad «en la que hemos realizado las diez estaciones de penitencia, dos salidas extrordinarias y la participación del paso de palio de la Virgen del Sacromonte en la Magna Mariana», como nos indicó el comisario, López Cánovas.

Entre sus intenciones figura la de normalizar la situación en la cofradía. Ayer mismo circuló una grabación del capataz del paso de palio, Eduardo Mochón, disolviendo la cuadrilla algo que el comisario ha desmentido a esta redacción. «Él no puede disolver la cuadrilla, por supuesto». Lópéz Cánovas ha indicado a nuestra redacción que «se mantienen los capataces Francisco Rodríguez y Eduardo Mochón con sus respectivos equipos y, por supuesto, respetamos los cambios aprobados en la anterior junta de gobierno respecto a los dos contraguías del palio. El comisario de la hermandad ha asegurado que estará en el cargo todo el tiempo necesario «puesto que no tiene fin de tiempo hasta que lo disponga la Curia Eclesiástica y se convoquen elecciones» manteniendo en sus cargos la junta de gobierno que había hasta el momento.