El Cristo de la Lanzada y la Virgen de la Caridad ya están en la parroquia del Corpus Christi

Las nueve de la noche de ayer marcaba el comienzo de la última fase de un largo período de trabajo y espera para los hermanos de la cofradía del Santísimo Cristo de la Lanzada. A las nueve menos cuarto de la noche estaba todo dispuesto en el interior del templo para iniciarse el traslado de las imágenes de esta hermandad zaidinera hasta el templo del Corpus Christi, donde serán veneradas durantes los dos meses próximos. «Es un día importante y nos sentimos con una inmensa alegría pero a la vez con tristeza porque abandonamos por un tiempo nuestra sede», nos comentó el hermano mayor de la cofradía, Javier Sierra, poco antes de iniciarse el traslado.

Formaban tras la cruz alzada quince parejas de hermanos en el primer tramo, precediendo a los ciriales del Cristo de la Lanzada. La presidencia la componían los antiguos hermanos mayores de la cofradía, Miguel Peláez, Francisco Rabaza, Miguel Angel Peláez, Diego Santiago y el actual hermano mayor, Javier Sierra, acompañado por el hermano mayor de la cofradía del Trabajo, Ángel Aguilera, precedida la presidencia por una representación, con guión, de esta cofradía de la parroquia del Corpus Christi. Detrás marchaba el consiliario y párroco, Daniel García, junto al sacerdote Javier Sabio.

El segundo tramo lo integraban diez parejas de hermanos, ciriales y las andas de la Virgen de la Caridad, mandadas por Francisco Carrasco. A las diez y cuarto de la noche entró el cortejo en la parroquia de la calle Navarra para depositarse las imágenes en una de las capillas laterales del templo, donde permanecerán hasta el final de las obras presvisto para comienzos del mes de septiembre próximo.