3 de mayo de 2024
Actualidad

Jesús Nazareno de las Penas presidió el Vía Crucis de Reglas de la cofradía de San Agustín, treinta años después

La imagen, restaurada recientemente por Antonio Custodio (Jaén), estrenó cruz.

Sobriedad y recogimiento en el cortejo del Vía Crucis celebrado anoche en la hermandad del Santo Crucifijo de San Agustín. Volvió a las calles granadinas la imagen de Jesús Nazareno de las Penas, Titular de la hermandad del monasterio contemplativo del Santo Ángel Custodio, después de que en 1989 se realizara el acto penitencial por el entorno de la sede de la hermandad. El mal estado de la imagen, de 1789, obra del escultor Felipe González, impidió que volviera a salir en este Vía Crucis de Reglas. La restauración a la que fue sometido durante el pasado año y que concluyó en el mes de junio ha permitido el regreso de la talla a las calles granadinas.

Treinta y cinco parejas de hermanos integraron el cortejo divididos en dos tramos separados por la bandera penitencial. En el mismo ocupaba la presidencia miembros del cabildo de oficiales con el hermano mayor y dirigió el rezo de las catorce estaciones el sacerdote redentorista, director espiritual de la hermandad y vicario territorial, Francisco José Tejerizo.

Calles de singular sabor y recogimiento recibieron al Nazareno de las Penas en el acto penitencial hasta llegar al templo basilical de Nuestra Señora de las Angustias, Patrona de Granada, donde se vivieron momentos de singular belleza y atractivo religioso por la solemnidad del momento y por encuentro de ambas imágenes devocionales. Algo más de diez minutos estuvo la imagen en su interior. A las nueve menos cinco atravesaba el arco de entrada y a las diez y cinco abandonó el templo patronal. Vestía Jesús Nazareno su túnica bordada en el mismo año de su realización, 1789, en terciopelo granate. Las andas, de manera sencilla se habían adornado con rosas rojas, tulipanes y calas moradas, además de un variado adorno silvestre. En las esquinas, cuatro guardabrisones y en los costeros dos parejas de guardabrisas alumbraban al Nazareno. Estrenó la imagen una réplica de la cruz original, sustentada en sentido contrario al habitual, tal y como se venera en el monasterio del Santo Ángel Custodio. La réplica de la cruz ha sido realizada por Alberto Olmedo.

El regreso lo realizó la hermandad por las calles próximas al monasterio, cruzando la Acera del Darro para dirigirse a la calle Rejas de la Virgen y por calle San Isidro al monasterio de la calle San Antón, donde finalizó el rezo de la última estación a las diez de la noche.