Un equipo de la «Pablo de Olavide», de Sevilla, estudia durante esta semana la orfebrería, piedras y esmaltes de la vestimenta de la Virgen del Rosario
Hasta el próximo viernes 10 de febrero, la Santísima Virgen del Rosario Coronada estará retirada del culto debido a las labores de investigación que está realizando un equipo multidisciplinar dirigido por la doctora Pilar Ortiz, Decana de la Facultad de Ciencias Experimentales de la Universidad Pablo de Olvide (Sevilla) sobre el vestido de plata, piedras y esmaltes, así como una de las coronas de la copatrona de Granada. Este equipo está integrado por investigadores y científicos de dicha universidad y el Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico (IAPH).
En los últimos meses del pasado año 2022 se comenzó este interesante estudio, realizado con las últimas tecnologías aplicadas en cristalografía y gemología, que se culminarán en esta semana. La doctora Ortiz fue la encargada de realizar el estudio y catalogación de las 277 piedras que adornan el vestido de la Santísima Virgen durante la restauración realizada a la imagen en el año 2010 en el IAPH, y el pasado mes de octubre ya ofreció un avance de sus investigaciones dentro de las Conferencias de clausura del CDL Aniversario de Lepanto.
El vestido de plata fue donado en 1628 por suscripción popular de los granadinos, gracias a la iniciativa de María, Catalina y Jerónima de la Torre. El mismo fue obra del orfebre de oro y plata Pedro López Ballesteros, hermano de la Archicofradía, como recientemente se ha conocido gracias a las investigaciones del historiador José A. Palma, diputado de cultos de la cofradía.
Durante estos días, ante la ausencia de la Virgen, se puede venerar la imagen del Niño Jesús vestido de cristianar y sentado sobre su trono, a la espera del inminente regreso de la patrona y bienhechora de la Archicofradía.
Con este proyecto, pionero en las cofradías y hermandades de Granada, se vuelve a poner en valor el patrimonio granadino, y en especial, la imagen de la Santísima Virgen del Rosario Coronada, admirado y venerado no solo desde el prisma devocional, sino también desde la esfera histórico-artística y científica.