La Virgen del Dulce Nombre y San Juan Evangelista retornaron al barrio Fígares

Veinte parejas de hermanos participaron en el cortejo de regreso a San Emilio, precediendo a las andas de traslado que devolvían a su Titular mariana y a San Juan Evangelista después de haber recordado en el interior de la basílica de San Juan de Dios los primeros veinticinco años ocurridos desde la bendición de ambas imágenes. Eucaristía y besamanos han protagonizado estos últimos días en el templo de la Orden Hospitalaria, poniéndose punto y final con la salida desde la basílica, a temprana hora de la tarde, y su retorno al barrio Fígares.

Uno de los momentos entrañables ha sido la entrada de las andas procesionales de la Virgen de han adentrado al interior de la capilla del Santo Cristo de San Agustín donde se venera al Sagrado Protector de Granada y con cuya hermandad se comparte proximidad en el barrio y sobre todo unos entrañables lazos de unión desde los momentos de su fundación. Luego restaba el regreso a su sede canónica que se vio cumplida después de tres días de ausencia del templo de San Emilio.