Continúan celebrándose con éxito las I Jornadas Cofrades en Centros Penitenciarios de la cofradía de la Esperanza
La hermandad de Nuestra Señora de la Esperanza continúa celebrando las mesas redondas organizadas dentro de las I Jornadas Cofrades en Centros Penitenciarios Nuestra Señora de la Esperanza. En esta ocasión, en el Centro de Inserción Social Matilde Cantos, se desarrolló bajo el título: “Devoción intramuros”: Una aproximación a las principales devociones granadinas que mantienen vínculos con las personas privadas de libertad.
Los componentes de la mesa, José Antonio Maroto Fernández, cofrade mayor de la hermandad del Rescate, Enrique Crespo Muñoz, hermano mayor de la hermandad de la Soledad de San Jerónimo, Juan Luis Romero Sánchez, hermano mayor de la hermandad de la Merced, Antonio Jesús Reyes López, ex-hermano mayor de la hermandad de la Esperanza y Sorín Catrinescu, delegado de Pastoral Penitenciaria de la Archidiócesis, hablaron de las distintas vinculaciones de cada una de estas cofradías con las personas privadas de libertad.
El debate estuvo apoyado en la proyección de varias presentaciones multimedia sobre cada una de estas devociones. Muy interesante resultó la explicación de todo el procedimiento jurídico-legal para la liberación de un penado cada Viernes Santo por la hermandad de la Soledad; el origen de la vinculación trinitaria del Rescate con todos los cautivos; el origen histórico de la advocación de la Merced y el canje de cautivos por frailes mercedarios y la labor durante años de la hermandad de la Esperanza con los internos de los centros penitenciarios de Granada.
La tercera charla, desarrollada en torno al paso de palio como expresión de los sentidos, contó con la presencia de Luis García Quintero, capataz del paso de Nuestra Señora de la Esperanza, Jorge Heredia, prioste de la hermandad de los Escolapios y vestidor de tallas marianas, Manuel Vedia, florista, y Santiago Delgado, prioste de la hermandad de la Esperanza.
Con los cuatro, los internos de la prisión de Albolote conocieron la esencia de un paso de palio, su montaje, los sonidos que lo acompañan y su forma de caminar.
Fernando, un interno del centro, cantó dos impresionantes saetas, una a Jesús del Gran Poder y otra a la Virgen de la Esperanza que emocionaron a todos los asistentes. Los integrantes de la mesa fueron respondiendo a cuantas cuestiones se plantearon por los internos asistentes. Los internos del centro obsequiaron a los ponentes con un precioso nazareno en madera diseñado y realizado por ellos mismos. Sin duda la valoración global de las mesas desarrolladas hasta el momento es sumamente positiva tanto para los ponentes como para los internos de ambos centros penitenciarios.
