Tres Vía Crucis llenaron de Pasión las calles del centro de la ciudad y Zaidín, en la noche del tercer viernes de cuaresma
Tres Vía Crucis se desarrollaron anoche en el centro y Zaidín de la capital granadina. Tres convocatorias que fueron muy respaldadas y arropadas por granadinos y visitantes que es encontraron con citas cuaresmales por las calles de la ciudad, como antesala de nuestra cada vez más cercana Semana Santa. En la plaza de la Universidad esperaban el cortejo de la cofradía Universitaria con la imagen de Nuestro Padre Jesús de la Meditación. Marchaba con el acompañamiento de la coral Santa Cecilia, de Granada, y con la participación de seis filas de tres hermanos cada una precediendo las andas de Via Crucis.
La presidencia la llevaba el hermano mayor, Antonio Granados,acompañado por el delegado de Cultura de la Junta de Andalucía y hermano de la corporación, Fernando Egea Fernández-Montesinos. Realizó el rezo de las estaciones el párroco y consiliario, Miguel Ángel Con y las andas fueron portadas por las cuadrillas masculina y femenina de la hermandad de los Estudiantes de Granada.
A la misma hora partía desde el templo parroquial de Santa Ana el cortejo con la imagen del Señor del Gran Poder. El trio de capilla de la banda de San Isidro, de Armilla, precedia las andas y en el cortejo participaron cincuenta y cuatro parejas de hermanos, en un largo cortejo dividido en varios tramos por la bandera penitencial de la hermandad. El rezo de las estaciones lo dirigio el consiliario y párroco de San Gil y Santa Ana, José Gabriel Martín, recorriendo un entramado de calles del Bajo Albaicín que ofreció también momentos de singular belleza y atractivo que no dejó impasible a quien lo contempló por la placeta de la Concepción o ya de regreso por la Carrera del Darro, hasta nuevamente plaza de Santa Ana.
La tercera cita sorprendió también por el recogimiento y elegancia de la presentación del Santísimo Cristo de la Sagrada Lanzada, en esta ocasión discurriendo por las amplias calles y avenidas del barrio del Zaidín. Se adentró en el barrio tras la salida de su parroquia de los Dolores por la Avenida de Dílar y regresando por la Avenida de Don Bosco. Cuarenta y una parejas de hermanos formaban el cortejo que iba presidido de manera extraordinaria en posición erguida en las andas de traslado que ha cedido la hermandad de Monserrat, de Sevilla. Un sencillo adorno en variedad de flores rojas y moradas se extendían a los pies del Crucificado de Barbero Gor, custodiado por candelabros de guardabrisas.
Los anteriores hermanos mayores de la corporación del Martes Santo participaron en la presidencia y el rezo estuvo dirigido por los párrocos, Daniel Martín y José Alberto Fernández, mientras que el acompañamiento musical corrió a cargo de «GranaMusic».